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Mostrando entradas de agosto, 2009

Sábados Literarios de Mercedes. Algo sobre mi blog

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Empezaré por el final. Desde hace unos meses, cada semana espero que el conductor de turno, proponga un tema como punto de partida para confeccionar el relato correspondiente. Sin pretenderlo confieso que se genera cierta dependencia que hace más cómoda la elección de aquello de lo que escribir, añadiendo cierta magia el reto de contar algo a partir de lo que te sugiere un tercero. Pero, no siempre fue así, ni tan siquiera ahora lo es del todo, sigo alternando los relatos de los “Sábados...” con mis sencillas aportaciones en forma de crónicas, criticas, reivindicaciones, admiraciones, juegos, adivinanzas, confesiones, etc. En definitiva sentidos divertimentos que cuelgas en tu particular e ilimitada página y en los que sin intención de hacerlo dejas mucho de ti mismo. Si a algún curioso al que le sobrara el tiempo, quisiera releerme, sabría sin duda, cual es mi ideología, mi color preferido, mis gustos musicales, mi autor, pintor, escultor o actor admirado, donde he viajado y donde me

Sábados Literarios de Mercedes. El Viento

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"Es el viento que te habla, que acaricia tu corazón. Es el viento que te pesa, es el viento que soy yo” La voz de Nino sonaba limpia, cristalina, casi igual que aquel día en el que se conocieron, pero era Ella, la que no oía con claridad, las lágrimas y los sollozos le impedían vincular la melodía con todos y cada uno de los detalles de aquel primer encuentro, aquella primera vez sobre la que construyeron un futuro para compartir. “Si no estoy junto a ti, pero crees sentir que acarician tus manos, si no estoy junto a ti, pero crees sentir que alguien besa tus labios...” El mismo viento del que le hablaba la canción, tomaba fuerza en la calle, a partir de ese momento, el viento, tendría un significado diferente, ya no habrían mas brisas acariciando su piel, mas Gregales, mas Ponientes, ni Levantes, ni Tramontanas, todos ellos y más, se habían conjurado en contra de ella, condenando un porvenir que empezaba a llenarse de tristeza. “...si tu escuchas mi voz, mis palabras de amor y no